Heridas de la infancia

Herida de rechazo
Se genera cuando una persona sintió en su infancia que no era aceptada o deseada por su cuidador. Esta herida es muy profunda, ya que hace sentir a quien la sufre que su “derecho a existir” está siendo negado.
Esta sensación puede surgir a partir de experiencias reales de rechazo o de interpretaciones subjetivas de ciertos eventos como rechazo.
Las personas con esta herida suelen desarrollar patrones como:
- Ser perfeccionistas.
- Complacer a los demás en exceso.
- Tratar de aparentar para ser aceptados.
Herida de abandono
Esta herida está relacionada con una profunda sensación de soledad y ocurre cuando una de las figuras parentales no estuvo presente o cuando no se estableció una conexión emocional significativa con el niño.
Quienes han sufrido abandono en la infancia pueden manifestarlo a través de:
- Minimizar la importancia de las personas cercanas en su vida.
- Tener una necesidad excesiva de aceptación.
- Desarrollar hiper-independencia o hiper- dependencia.
Herida de humillación
Se origina en relaciones donde los cuidadores hicieron sentir al niño como insuficiente o “malo”, lo que puede llevarlo a percibirse como alguien no merecedor de amor.
Esta herida se manifiesta a través de patrones como:
- Baja autoestima.
- Dificultad con el autocuidado.
- Sensación de no merecer experiencias agradables o miedo a perderlas.
Herida de traición
Se desarrolla cuando los cuidadores o personas en quienes el niño confía rompen esa confianza en momentos clave.
Esto puede generar patrones como:
- Necesidad de controlar todo y a todos.
- Percepción pesimista del mundo.
- Actitud desconfiada y negativa hacia los demás.
Herida de injusticia
Se forma cuando los cuidadores son fríos y autoritarios, demostrando afecto solo cuando el niño alcanza un logro.
Esto puede llevar al desarrollo de patrones como:
- Autoexigencia extrema.
- Miedo a perder el control.
- Dificultad para conectar emocionalmente con los demás.
¿Se pueden sanar las heridas de la infancia?
El primer paso para sanar estas heridas es aceptar nuestras emociones y comprender su origen. Posteriormente, es necesario modificar los patrones de comportamiento que se han repetido durante años. Este proceso no es sencillo y, en muchos casos, requiere el apoyo de un profesional.
Referencias
Psicólogos en línea. (2024). ¿Qué son las heridas de la infancia?
https://www.terapify.com/blog/5-heridas-de-la-infancia-mas-comunes-y-como-sanarlas/
Publicado el 28 de julio de 2025